En esta columna del lunes pasado, titulada "La cultura está ignorada en las propuestas electorales", se escribió, entre otras cosas: "los teatristas vienen reclamando deudas impagas del Ente Cultural, en relación a la Ley Provincial 7.854 (2006), y la falta de cumplimiento de los subsidios que envía el Instituto Nacional de Teatro (INT)".
Este periodista recibió un pedido de rectificación del representante del INT, José Ramayo, con el siguiente texto: "Quiero aclarar que el INT cumple con todos los subsidios que son aprobados por el jurado; en ningún caso se dejó de pagar un subsidio, salvo cuando el beneficiario renuncia (que en ese caso lo hace por escrito), o cuando es pasado a archivo por falta de tramitación del beneficiario (en todo caso más de un año sin tramitar). El grupo, sala o investigador que solicitó al INT un subsidio y dicha solicitud fue aprobada por el jurado de evaluación de proyecto, siempre el INT hizo efectivo de acuerdo a la normativa dicho subsidio".
En rigor, debería haber expresado que no siempre se cumple en tiempo con los subsidios, que es lo que genera el malestar de los teatristas. Por ejemplo: el pedido que se hizo para el festival latinoamericano ARRE, que se realizó en 2011, en esta ciudad, recién se efectivizó casi dos años después.
El INT sufre una hipertrofia burocrática que ha sido reconocido por el mismo director, Guillermo Parodi, cuanto le tocó asumir el año pasado. Por eso, una demanda constante del sector es que se reduzca al 10% el monto asignado para su administración. Su presupuesto supera los $ 70 millones.
"Sucede que el subsidio es un proceso administrativo que debe cumplirse, y lo que se llama burocracia es, en realidad, un control que ejerce el Estado para ver cómo se usan esos fondos que son públicos. Hay exigencias que cumplir y muchas veces las demoras se dan porque la documentación no está completa o está mal presentada. Se dan situaciones engorrosas. El teatrista tiene que amigarse, por decirlo así, con estas cuestiones de la documentación. De todas maneras, nosotros también estudiamos de qué modos podemos mejorar y acelerar todo este proceso, que lleva su tiempo", le dijo Parodi a este diario en agosto, admitiendo, como se puede leer, la existencia de tales demoras y reclamos.
En distintas declaraciones, el funcionario se ha declarado favorable a federalizar al INT. "Uno de mis objetivos de gestión será intentar transparentar todo lo que se actúa, que la información esté al alcance de todos. Hay que sumarse a la sintonía fina que decía la Presidenta. Además, quiero que el INT sea todo lo federal que pueda ser. Que esté la posibilidad de llevar cultura a todos los rincones del país".
Pues bien, se advierte que una de las tareas pendientes es, entonces, agilizar estos trámites, en beneficio de los artistas. Porque, en definitiva, sin ellos, el teatro no existe.